Mi nombre es Jessica tengo 20 años y hace unos meses que trabajo de secretaria ejecutiva para una empresa en la zona de puerto madero se podría decir que es mi primer trabajo importante antes había estado también de secretaria y hasta de recepcionista pero cosas mas de barrio.
Soy rubia de pelo lacio, ojos marrones, 1,72 m de altura delgada muy buenas lolas 97 cm y un culito que deja atónitos a todos de 95 cm, mi jefe tiene toda la facha y a pesar de estar casado es muy putaniero, varias veces me tiro los galgos pero yo nada, se que el puesto me lo gane por mi figura y no por mi currículum pero no me importa si lo tengo lo tengo que aprovechar; en estos momentos ya tenemos mas confianza y aparte de piropearme en cada momento algún roce me da pero como no pasa de eso me hago la tonta y pasa, mas de una vez me he tentado a fregarle la cola cada vez que apoya su verga en mi culito.
Hace casi 2 años que estoy de novia y si lo que pasare a contarles no me lo impide supongo que antes de fin de años me iré a vivir con el.
Creo que el estar de novia hizo que no me entregara a mi jefe, nunca fui de regalarme pero la verdad que esta para comérselo a ese bomboncito, aunque sepa que solo seria una de sus tantas conquistas una mas de sus putitas como la recepcionista que mas de una vez la eh encontrado recostada en el escritorio y con su bombachita en el piso o arrodillada frente a Martín, así se llama mi jefe, por esos favorcitos se ha ganado unos lindos premios, o Paula la hija de uno de los ejecutivos de la empresa que de seguro que en cuando cumpla sus 18 tendrá su puesto asegurado como la mas joven de sus putas, lo cierto es que poco a poco me fueron agarrando ganas y en cualquier momento seria presa de mis dudas.
Comenzare por decirles que debo presentarme a trabajar en pollera o pantalón negro y una camisa blanca con una cinta roja, la camisa era casi transparente y solo podía ponerme algún corpiño blanco o color carne que dejaban ver mis aureolas en toda su dimensión y ni hablar de mis pezones cuando estaban erectos eran el constante ataque de Martín para seducirme; un buen día me pide que lo acompañe a una reunión con otros empresarios con los que debía cerrar un negocio muy importante, que finalmente fue todo un éxito, gracias a esto fuimos invitados a un boliche muy importante de puerto madero, la fiesta se estiro hasta muy tarde y el alcohol estaba a la orden del día me gustan los tragos pero no soy de tomar así que lo poco que tomaba me ponía cada vez mas alegre y mas cachonda, eso precisamente era lo que quería mi jefe y fue lo que logro, estaba vestida como vine de la oficina con esa transparente camisa que sumada a la transpiración que llevaba por la euforia del momento era como si mis senos estuvieran al aire libre, sus manos no podían contenerse y yo ya era recorrida por sus excitantes caricias todo comenzó con frotar mi abdomen mientras su verga intentaba escapar de su pantalón para usurpar mi pollerita su bulto crecía mientras me sacaba las ganas contenidas por algún tiempo de refregar mi culito en ese pedazo de carne sus manos abandonaron mi abdomen para alojarse en mis tetas desabrocho mi corpiño muy hábilmente y empezó a juguetear con mis pezones mi temperatura se estaba elevando y mi locura mas; nunca había sido infiel pero en estos momentos estaba excitada y dispuesta a todo, no paso casi nada de tiempo cuando empezó a besarme el cuello mi cuerpo tiritaba como una hoja en el frío invierno, pero ese frío era provocado por un intenso calor, puso su mano en mi cola y me dirigió hacia la salida, como una perrita obediente seguí a mi amo, subimos a su auto un ultimo modelo importado un BMW que cualquier hembra se entregaría por solo subir a dar una vuelta, nos dirigimos a un departamento que por como estaba presentado seguramente seria su bulo el lugar donde seguramente Daniela, la recepcioncita y Paula la encantadora muñequita tuvieron su sección de sexo.
me recostó en la cama y no pare de masturbarme me penetraba 2, 3 deditos, se sentó a mi lado semi desnudo metí mi mano dentro de su slip y encontré lo que buscaba, comencé a masturbarlo mientras me besa me tomo de la nuca y me atrajo hacia el, con su mano mas hábil paso a acariciarme los senos mientras yo seguía masturbándolo y penetrándome con dos dedos
Pero ahora su putita era yo, al entrar puso música muy suave y me pidió que bailara, me ofreció algo para tomar que ya no recuerdo y que acepte con gusto, desprendí mi camisa e improvise un strip tease, cosa que ni a mi novio le había hecho, tire mi camisa sobre la alfombra, subí mi corpiño y comencé a acariciarme las tetas, a pellizcar mis pezones, a saborearlos, mi lengua se movía como la mas hábil serpiente mordí mis labios entorne mi boca con mi lengua, estaba sacada como nunca, se acerco a mi, me beso paso su mano por mi espalda la llevo directo al sierre de mi pollera lo bajo y la desabotono dejándola caer en la mullida alfombra metió su inquieta mano en mi culito y empezó a bajarme la tanguita blanca que llevaba, me la bajo hasta casi las rodillas y desde ahí continué yo me agache como puta dejando mi colita bien paradita de regalo pase mis manos por mi pelvis aplaste mis senos seguí con mi mano derecha disfrutando de mis senos mientras que con la izquierda jugueteaba mi chuchi, me recostó en la cama y no pare de masturbarme me penetraba 2, 3 deditos, se sentó a mi lado semi desnudo metí mi mano dentro de su slip y encontré lo que buscaba, comencé a masturbarlo mientras me besa me tomo de la nuca y me atrajo hacia el, con su mano mas hábil paso a acariciarme los senos mientras yo seguía masturbándolo y penetrándome con dos dedos, sobaba su verga en todo su recorrido, salivó su mano y la llevo a mi conchita para completar mi mojadura estaba a mil todo mi cuerpo estaba en erupción le bese en el cuello, calzo tres de sus dedos en mi chuchi y dándole ritmo me fue enloqueciendo no podía dejar mis manos quietas, seguía con su instrumento y circundando mis pezones; se inclino sobre mi y ataco mi conchita, sus labios y su lengua me rebanaban el cerebro levanto mis piernas para hacerse mas espacio y enloquecía mas y mas tome mis pechos con ambas manos no sabia que hacer estaba excitadísima me retorcía los pezones acariciaba mis lolas mmm, se detuvo después de mordisquear mi clítoris, se paro y empezó un refriegue de su miembro en mi conchita y me entro, estaba tan desubicada que no note que no llevaba protección me la clavo de una estocada gemí como una de sus putas, no deje de hacerlo ni un momento, mientras llevaba mis piernas a sus hombros me giro como para hacérmelo desde atrás pero su pija se salió de mi vulva, la tomo la acomodo y otra vez adentro a sentir como me volvía a bombear me tomo por el cuello y con la otra mano despertó mi botoncito de la lujuria su manita volvió sobre mis pechos mientras no paraba de estimular mi clítoris me puso de costado y seguía con su faena, al rato me hizo arrodillar para mamársela, tome su verga con ambas manos y el tomo mi cabeza, acariciaba mi pelo no aguantaba mas, decidí volver a llevar mis deditos a mi chuchi mientras que con la otra mano seguía masturbando a Martín con ambas manos tome su trozo y de una a la boca me concentre en tenerlo a gusto pero duro poco, tomo mis senos y me levantó, bajo y me beso mmm, su lengua se enredaba con la mía las manos deleitaban mis pechos, los estrujo como la mas sabrosa naranja y le tomo su jugo se arrodillo frente a mi y me fue comiendo las tetas su lengua dibujaba círculos en mis pezones, se paro frente de mi y dejo su miembro entre mis lolas y entro a pajearlo, mientras lo pajeaba con las tetas pasaba mi lengüita por su punta y volví a llenarme la boca de pija ya a esta altura era mi mejor cojida y eso que me faltaba mucho me tomo de los pelos y entro a marcarme un ritmo se sentó sobre el borde de la cama y me subí sobre el, comencé a cabalgarlo sin parar recorría su enorme pija, elevándome hasta sentirla casi afuera para volver a calzármela hasta el fondo, una mano en mi cintura me sujetaba para que no me desprendiera y otra en mis tetas me mataban, la manito de la cintura fue bajando hasta encontrar mi orificio anal coló dos deditos y estalle en un grito inmenso estaba ya por acabar fue directo a mi vulva a tomar mis jugos que estaban por expandirse, fue ahí cuando me entro por el culito, ahí sss llevaba tiempo sin hacerlo por ahí pero no tuve que hacerme problemas lo tenia bien dilatado, se salió y me giro para hacérmelo desde atrás, así es mas placentero
– si siiii mmm que rico quiero que me cojas el culo como nunca me lo hicieron.
Mi culito era penetrado una y otra vez mientras mordía mi óvulo y besaba mi cuello me tomo uno de mis senos y los exprimió raudamente, su mano llego a mi clítoris y lo amaso hasta hacerme estallar me vine en un solo grito mientras sus dedos exploraban mi chuchi, me empezó a bombear a mas ritmo y lleno mi culito de la mas apetitosa leche.
– Sabia que no me equivocaba al contratarte, que ibas a ser buena en lo que mas me gusta
– Se nota que debes traer a todas tus empleadas acá.
– Si he traído muchas pero vos sos la mas eficiente
– Y mañana la mas eficiente será la nueva que traigas
– La nueva no porque a la que tendré todos los días será a vos, a partir de hoy serás mi secretaria privada
– Secretaria o puta
– ¿ Cual es la diferencia ?
– si claro tenes razón.
– No, no vos mi secretaria y cobras como secretaria, y cojes como puta
– Ahí siii seguí cojiendome como puta.
Coloco mis manos sobre un sillón y separo mis piernas su primer impacto fue nuevamente en mi colita solo un par de bombeos y después mi conchita, me tubo así por casi media hora intercalando penetraciones anales y vaginales sin soltar mis pechos y estimulando mi clítoris, me encontraba en el paraíso.
Mi locura aumentaba con cada penetración mi fuego interno estaba por hacer erupción, su verga alimenta mis llamas de placer, mi conchita exploto como un volcán cuando Martín acabó en mi interior su semen y mis jugos brotaban de mi como lava hirviente por mis canales corrían ríos del mas sabroso néctar de mi vulva; llego la calma y los pensamientos recorrieron mi mente, como podía haber llegado a todo esto, que excusas tenia, si acepte sin mas venir acá y la que apenas llego no hizo mas que entrar y sacarme la ropa fui yo.
Como haría para mirar a mi novio a la cara sabiendo que fui la puta de mi jefe, como haría para detener todo esto, quizás si le dijera a mi jefe que mi borrachera me jugo una mala pasada me creyera, sentí sus manos abrasarme y temblé de miedo, sentí sus dedos en mis pezones y tirite de placer, rozó mi clítoris, y encontré la respuesta, porque pensar en mi novio si me encanta ser la puta de mi jefe.
Fui directo a su miembro y lo mame hasta tenerlo bien rígido me senté sobre el y comencé a cabalgarlo hasta llegar a consumir su ultima gota de energía aunque yo no tuve un nuevo orgasmo logre hacerlo acabar por tercera vez a el.
De esto ha pasado algo mas de una semana y desde entonces solo lo he hecho una sola vez con mi novio pero con Martín esta tarde fue la tercera y la primera en su oficina, creo que Pauli, la dulce jovencita, algo sospecha, porque desde hace unos días su mirada hacia mi es distinta, nunca me he fijado en otra mujer pero esta damita tiene su encanto y si Martin me lo pide, quizás podríamos llegar a tener algún jueguito los tres, si claro si llegase a pasar algo ya tengo a quienes contarles, Besos Jessica.
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