Siempre me ha gustado ser deseada, la seducción, la penetración y es así que en mi inicio sexual me desenfrene y como era tan rico y yo tan ingenua tuve sexo con diferentes hombres sin condón y como con el primero me dijo que si acababa afuera ya era suficiente para no quedar embarazada seguí teniendo sexo sin condón y pidiendo que acabarán fuera para no quedar embarazada pero algunos sacaban su pene ya chorreando de semen que habían dejado en mi interior y como consecuencia en unos meses de mi activa y promiscua vida sexual quedé embarazada.
Mi familia es muy conservadora y como vivo en un pueblo chico pronto mis padres se enteraron de mi promiscuidad y de mi embarazo.
Pese a ya ser mayor de edad para ellos fue una vergüenza y me mandaron a vivir con una tía en una grande ciudad y por allá pasar todo mi embarazo.
Al inicio con vergüenza llegue y mi tía me trataba como empleada doméstica, imponiendome todo tipo de labores domesticas, era un castigo por la forma que llegue pero pronto vi como el esposo de mi tía me miraba diferente y siempre que ella no estaba me trataba muy bien y me consentia.
Cada noche antes de dormir el esposo de mi intia bajaba por un vaso de leche y me servía otro, la escusa perfecta para llevarlo a mi cuarto que era el de la servidumbre o sea que estaba a lado de la cocina mientras que los otros cuartos estaban en el piso superior así que no se escuchaba nada de lo que pasaría pronto en ese pequeño cuarto.
Como ya me estaban creciendo la barriga y mis tetas la ropa me quedaba bien chica y las miradas morbosas de ese hombre maduro no eran discimuladas me ponía más cachonda y coqueta, encerada en aquella casa como castigo y acostumbrada a que muchos hombres me deseen las miradas del tio Óscar eran como un vaso de agua en el desierto para esta sedienta mujer caliente que solo quería tener un buen trozo de pene que roce con cada penetrada sus paredes vaginales, eso hacia que cada vez estuviera más deseosa por sus nocturnas visitas.
Tenía que hacer algo, pues de miradas y vaso de leche no pasada y ya de eso eran dos semanas y yo muy sedienta de sexo y orgasmos.
Así que se me ocurrió un plan, esta noche me haría la dormida pero totalmente desnuda.
Ya en la noche me bañé y me quedé desnudita en la cama fingiendo dormir a la hora que siempre llegaba el tío.
Tan solo de esperar que llegara empecé a sentir consquillitas en la parte baja de mi vientre y entre mis labios vaginales empezó a salirme babita transparente, dejándome muy lubricada y con unas ganas locas de ser penetrada.
La hora llego y Óscar llegó con su leche en la mano cuando abrió la puerta con mucho cuidado como siempre tratando de no hacer bulla y me vio sin sábanas y completamente desnuda, creo que se le cayó la baba pero algo que se le paró fue otra cosa.
Yo le esperaba con ansias pero mostrando mis nalgas y espalda hacia la puerta, me llamo por mi nombre Lolita y yo fingiendo estar profundamente dormida, su piel rozaba mi piel con la escusa de llamarme más vigorosamente lo cual sentí super excitante y me mojaba más mis ya húmedos labios vaginales al punto que ya mi lubricación se soltaba hasta afuera de mis labios vaginales.
En eso Óscar decía en voz baja, que delicia de mujer, muero por penetrarla y eso me motivo a girame para que tenga un primer plano de mis grandes tetas y de mi vagina dejandola bien abierta para que ese olor a deseo, a sexo lo atraiga y note lo mojada que estoy y se decida de una vez.
Mi plan iba funcionando a la perfección pues Óscar lleno de lujuria y deseos de lo prohibido al saber que era la sobrina de su mujer, una chica de 18 años y embarazada de quién sabe quién ? Y totalmente desnuda, tuvo una erección tan fuerte que nunca había visto a su miembro tan grande y Grido lleno de sangre y pasión x una mujer algo que hace mucho tiempo no había sentido pues el sexo con su mujer era casi nulo y aburrido, así que esos deseos reprimidos estaban a punto de estallar ante ese no en y deseoso cuerpo, con piel tan suave como el pétalo de una flor.
Oscar aún con algo de cordura mantenía aún puesta sus ropas pues sabía que si se desnudaba no podría parar.
En lo que ve que Lolita se voltea siente un olor muy sutil y envolvente que lo atrae a su vagina, ese olor a deseo, a sexo, a vagina lo hechizo y no pudo evitar acercar su nariz a la vulva de la embarazada primeriza y pasarle la lengua muy superficialmente pero al notar su babita comenzó desesperadamente a chuparla, la meterle sus dos dedos mientras seguía chupando y lamiendo tan delicioso néctar que Óscar al fin perdió la cabeza e intentaba sacar a la roca que tenía como pene en ese momento, tan desesperado x salir y penetrar que con una sola mano pudo maniobrar para sacarlo de su encierro y una vez que chupo y mamó desesperadamente cogió con su mano el pene y acercándolo a la vagina de tan deseosa hembra le metió tremenda polla hasta lo más profundo y tan desesperadamente metía y sacaba xq ya no pensaba solo quería penetrarla una y otra vez tan duro y rápido como jamás en su vida lo había hecho, Óscar siempre fue un caballero pero ahora se había transformado en todo en semental, un animal sexual y eso justo eso era lo que deseaba Lolita quien al notar que Óscar le chupaba con mucha intensidad el clitoris y me metía los dejos empezó a jadear del justo y en la primera Mérida de verga ella estalló con un gran orgasmo mojando aún más el pene duro de Óscar, con toda la pasión que Óscar me penetraba mi vagina se contraía y generaba distintos cosquillleos y órganos como nunca había experimentado antes, que delicia, que pasión, ardíamos en deseos y me penetraba tan salvajemente que jadeaba y gritaba de la rica cogida que me daba, el deseo eran tanto que nos mordiamos, chupabamos, besábamos y a penas podíamos respirar hasta que Óscar acabo dos veces seguidas, una tras otra en mi vagina.
Fue sensacional, una de las cogidas más deseosas y esperadas de mi vida.
Luego de esa noche cogemos todos los días a cada rato cuando la tía no está o durante las madrugadas pero no me deja de penetrar al menos hasta que descarge su semen una o dos veces al día
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