Una noche como prepago con mi prima y una amiga

Estaba tomando café con una amiga y una prima en una noche y en el medio  de las conversaciones salió el tema de buscarnos dinero como prepago, pero nos moríamos del miedo que nos conocieran, así que nos pusimos una cita el viernes, compramos ropa ajustada y nos quedamos de ver en el terminal de transportes, ese día llegamos ahí con tacones altos, con un peinado lindo y muy arregladas, dispuestas a buscar un hombre con dinero.
Después de un par de horas de camino llegamos a un lugar que es reconocido por el narcotráfico y pues que mejor lugar para encontrar un par de hombres dispuestos a pagarnos bien por tener relaciones con ellos una noche .
Ahí estábamos, en frente a un lugar desconocido y aun arte que nunca habíamos hecho, experiencia si, mucha pero con desconocidos jamás, bueno frente al parque del pueblo nos hicimos un rato a pensar que íbamos hacer, fuimos a el mejor bar que había disponible en el lugar, entramos con nuestros zapatos altos y nuestros vestidos cortos y hermosas, al entrar nos miraron de todas las mesas y caminamos imponentes hasta una mesa, pedimos la carta del lugar, no habíamos ordenado cuando a la mesa llego una botella de whisky de regalo, agradecimos al mesero y miramos quienes nos habían enviado esa botella a la mesa y eran dos hombres, no eran simpáticos, eran bajos, un poco gordos y mal vestidos, pero tenían unas cadenas de oro rodeando el cuello, dos escoltas detrás de ellos armados y con eso bastaba para darnos cuenta que eran los indicados; nos quedamos en la mesa esperando que se acercaran, brindamos y hablamos un poco, como para no mostrar las ganas de todo y ahí al pasar un par de canciones se acercó un escolta de ellos y nos invitó a seguir a su mesa, nos miramos entre nosotras y nos sonreímos por que ya estábamos logrando con nuestro cometido, nos levantamos de la mesa hermosas unas divas con nuestros cabellos largos hasta las nalgas, nuestras hermosas nalgas y nuestro bronceado color canela, seguras de lo que íbamos hacer una noche .

“te quiero comer, que debo hacer?” a lo cual le respondí con una sonrisa y moví mi mano haciendo una seña a dinero, el se apresuró a preguntar cuanto y no les diré el monto solo se que me alcanzó para muchas cositas jajaja, al acordar el dinero el me tomó de la mano y me llevó a su habitación y sin pensarlo dos veces abrió mis piernas e introdujo su pene con fuerza,

Nos sentamos hablamos y se rieron de nuestras ocurrencias y por supuesto mi super acto de una noche de tomar tragos a fondo blanco, en eso nadie me gana, entre risas y trago nos fuimos acercando y uno de ellos no dudó en acercarse a mi y tocarme la pierna, me fue a dar un beso pero esquivamente me retiré, no podía besarlo sin saber como le iba a pedir que me cancelara, de eso no habíamos hablado nosotras, de que forma íbamos a pedir que nos pagaran… ahí en medio del toqueteo le dije que saliéramos a bailar, bailamos un par de canciones pero tal vez no se aguantaron y nos ofrecieron seguir tomando en su finca, cosa a la cual accedimos, nos subimos en sus camionetas rumbo a su finca, no puedo negar que los nervios me consumían mientras íbamos de camino solo pensaba si había sido una buena idea esto de ir a esa finca con dos desconocidos, bueno ahí íbamos de camino, vulnerables y en vestido de tacones por una vía sin pavimentar a más de 80 km/h… una noche la incertidumbre de lo que iba a suceder me daba vueltas y sin gesticular palabras solo nos mirábamos con mi amiga por que mi prima iba en la otra camioneta, así con nuestras caras de asombro de en que nos metimos, sólo nos mirábamos cómplices de lo que estábamos haciendo, ahí frente a nosotras un porton gigante de madera y hierro el cual se abrió ante nuestros ojos antes de que llegaran los carros, un camino en piedra con luces a su paso y unos jardines exuberantes nos recibieron para al fondo ver una casa de dos pisos con unas ventanas gigantes en vidrio, nunca había llegado a un lugar así… nos dieron la mano al bajarnos del carro y como si unas princesas hubieran llegado a su castillo, así nos recibieron, nos preguntaron que queríamos tomar, que si nos preparaban comida y un montón de atenciones, nos sentamos en una de las salas, una pequeña con música y poca luz al poco tiempo de estar ahí llegaron unos mariachis a cantarnos y nos hicieron seguir al sauna, pues sin miedo, pudor o algo más … ha de ser el licor en nuestras cabezas que nos liberó y nos quitamos la ropa sin más ni más y desnudas entramos al sauna con nuestros vasos con licor en nuestras manos, nos sentamos y seguimos hablando como si nada estuviera sucediendo, el mismo se me acerco y me dijo al odio “te quiero comer, que debo hacer?” a lo cual le respondí con una sonrisa y moví mi mano haciendo una seña a dinero, el se apresuró a preguntar cuanto y no les diré el monto solo se que me alcanzó para muchas cositas jajaja, al acordar el dinero el me tomó de la mano y me llevó a su habitación y sin pensarlo dos veces abrió mis piernas e introdujo su pene con fuerza, me palmoteó fuerte los senos y me los chupo dejando marcas, me daba con tanta fuerza que me cortaba el aliento con cada envestida que me pegaba, me giró y me pregunto que si podía hacerme anal a lo cual le dije que no, que no había pagado por eso que eso me dolía, me dijo “pídeme lo que quieras para poder comerme ese anito” yo siempre había querido una moto, así que así en cuatro con una verga en mi vagina y sus manos en mis nalgas le pedí una motocicleta y me dijo “si te lo dejas hundir sin lubricante te la compro mañana” acepté y así sin nada de previo aviso me metió la verga por e culo una noche el grito fue tan ensordecedor que afuera escucharon, mi prima y mi amiga se apresuraron a golpear la puerta para saber que había sucedido y yo dije que todo estaba bien mientras el me hundía la verga sin ningún temor, el dolor y el placer se unían y con cada penetrada sentía cada vez más grande su pene y el ano me ardía de dolor y de placer y así en medio del dolor y placer tuve un orgasmo y el me siguió al escuchar mis gemidos dejándome su leche dentro de mi ano, pero el dolor seguía y su semen me ardía en el ano y salía semen con sangre, me metí al baño a ducharme, el baño eran solo vidrios así que se podía ver todo lo que sucedía y mientras me duchaba el se masturbaba con una mano sostenida al vidrio y mirando fijamente mis nalgas así mientras se tocaba yo decidí también en la ducha masturbarme y empece a tocarme la vagina mientras lo miraba masturbarse, estaba metiéndome los dedos cuando llegaron mi prima y mi amiga con el hombre con el que estaban ellas, se metieron a la ducha y yo estaba ardiendo con mis dedos dentro de la vagina, mi prima me empezó a besar y mi amiga se arrodillo para lamerme la vagina el hombre que había estado conmigo entro a la ducha y me metió dos dedos en el ano, el dolor volvió, pero el placer también, mientras nos besábamos con mi prima toque sus senos, no sabia que tenia tan ricos senos, me encorve para poder chuparlos, al agacharme el otro hombre vino y me penetró el ano, esta vez no dolió tanto y se sentía delicioso, tanto que mis gemidos esta vez no eran de dolor, un placer indescriptible,una noche  mi amiga me hundió los dedos en la vagina y tuve un orgasmo delicioso, sin nombre, absoluto y perfecto; al poder abrir mis ojos vi como mi prima era penetrada contra la pared y este hombre nos pedía que le lamiéramos el pene y sus guevitas, mientas se lo chupabamos bien rico abrió las piernas y levantó una pierna, quería que le lamiéramos el ano, con mi amiga acercamos la lengua y empezamos a lamerle el ano entre las dos mientras nos besábamos y lo masturbabamos, le rocé el ano con mis dedos y estallo lavándonos la cara en semen, mi prima seguía siendo penetrada fuerte y rico y él me pido que me acercara, me giró y me penetró el ano apresuradamente, con fuerza y agarrando mis senos me lo metió fuerte para venirse en mi ano de nuevo soltando un gemido delicioso.
Nos vestimos, nos dieron nuestro dinero, obvio yo no me iba a ir sin mi moto, el ano aun me ardida del dolor así que le reclamé de nuevo y él le dio instrucciones a sus escoltas y al llegar al pueblo esperamos que amaneciera y me compraron mi moto, con moto nueva me fui con mi prima a la ciudad y mi amiga en bus nos alcanzó, no puedo negar que lo hemos vuelto hacer, es que tantos mimos lo hacen a uno volver y ahora ellos solo pasan por nosotras en el carro y nos llevan a sus fincas para pasarla rico una noche .